El queso
El queso es un alimento derivado de la leche, uno de los productos lácteos más populares, tanto para los más jóvenes como para los adultos.
En el caso de los más pequeños y adolescentes el queso les va a ayudar en el crecimiento y fortaleza de huesos y dientes.
El queso se produce sobre todo gracias a la leche de vaca, oveja y/o cabra.
Son muchos los beneficios que nos aporta el queso, sobre todo los relacionados con el el cuidado de los huesos, ya que ayuda a prevenir fracturas de huesos, en el caso de los más mayores previene del desgaste óseo y problemas relacionados con la osteoporosis. También ayuda a conservar sanos los dientes.
El queso es un alimento que resulta muy delicioso pero que tiene como inconveniente la cantidad de grasas y calorías, salvo el queso fresco, como el de Burgos, que se suele recomendar en las dietas de adelgazamiento.
Propiedades nutricionales
Dependiendo del tipo de queso, las propiedades nutricionales varían, pero algunas son comunes como el calcio, vitaminas A, B2, D y E, así como proteínas. El queso contiene todos los aportes nutricionales que nos aporta la leche.
Las proteínas que contiene el queso son de alta calidad, como las de la carne roja. Estas proteínas ayudan a mantener y reparar los tejidos corporales.
El calcio que aporta el queso es la cantidad recomendada diaria.
Las vitaminas que nos aporta el queso, A, D, B12 y B2, son fundamentales para ayudar en la cicatrización, además de ayudar en el correcto funcionamiento de los sistemas cardiovascular y nervioso.
Se puede destacar que el queso es escaso en hidratos de carbono, pero como normalmente se suele comer acompañado de pan, es este el que nos aporta la cantidad necesaria de hidratos de carbono.
Cantidades de queso recomendadas
Dependiendo de la edad y circunstancias como el embarazo, hacen que no sean iguales las cantidades de queso recomendadas para todos.
Como norma general se recomienda una porción de 30 gramos de queso, que se puede acompañar con un vaso de leche o un yogur desnatado. En el caso de niños y adolescentes, esta porción de queso se puede elevar hasta los 40 gramos al día.
En el caso de las embarazadas se recomienda entre 1 y 1.3 gramos de calcio que pueden ser aportados mediante el queso.
Aquellos que comen de forma habitual carnes rojas y un exceso de grasas, es mejor que se limite el consumo de queso.
Entre los tipos de queso más habituales, como son el magro, semigraso, tierno, semicurado y curado, son el tierno y el semicurado y curado los que mayor cantidad de grasas tienen. Sin embargo son el queso magro y el semigraso los que más proteínas aportan. De la misma manera que estos dos son los que menos calorías aportan, y el queso curado es el más calórico de todos.
Tipos de quesos
Desnatado: Son aquellos que menos grasas contienen, un mínimo del 10% de grasa
Semidesnatado: Entre un 10% y un máximo del 25% de grasa
Semigraso: Un mínimo del 25% y un máximo de 45% de grasa
Graso: Entre un 45% hasta un máximo del 60% de grasa
Extragraso: Un mínimo del 60% de grasa
Debido al alto contenido en grasas, se debe moderar el consumo, y sobre todo aquellos que padezcan de sobrepeso u obesidad.
Fresco: Se puede consumir tras el proceso de elaboración, a penas contiene grasas.
Blanco pasterizado: Es el queso fresco cuyo coágulo se somete a pasterización.
Dentro de las diferentes clasificaciones de quesos que se pueden hacer, algunos de los siguientes son de los más populares
Conocidos como quesos azules por las bacterias que actúan en ellos no encontramos con el Roquefort y el Cabrales.
En España los quesos más populares son el Manchego, cabrales, el queso de Burgos y el queso de Tetilla.
Fuera de España nos encontramos con el queso Cheddar en Irlanda, Stilton en Inglaterra, Gouda y Edam en Holanda, Emmental en Suiza, Camembert, Gruyere y Roquefort en Francia, Mozzarela, Parmesano, Gorgonzola y Provolone en Italia.
El queso en la cocina
Como hemos comentado anteriormente, el queso no contiene ni hidratos de carbono nivitamina C, por eso, los alimentos con los que se puede acompañar para paliar estas carencias son frutas como las uvas, cítricos como las naranjas, pan y pastas.
Además el queso resulta muy versátil en la cocina, debido a la gran variedad de quesos en el mercado, son infinitas las posibilidadades que nos ofrece en la cocina, desde el queso fresco en la ensalada y postres acompañado de frutos secos, así como los más sabrosos que se pueden usar para gratinar, acompañar en la pasta o el arroz, como el conocido risotto.
Los quesos azules se suelen usar para hacer salsas con un gran sabor o para la preparación de rellenos.
